El nuevo normal

por Sandra Farias


Esta semana nos enteramos de que el Covid-19 ha venido para quedarse. Es la misma noticia que le dí a mis tres gatos, que siguen preguntándose hasta cuando seguiremos ocupando todas las sillas y camas de la casa durante las 24 horas del día.

Años atrás, unos amigos que vivieron en Israel por mucho tiempo y que vieron decenas de atentados en las calles, que ocurrían frecuentemente, me dijeron algo que ahora me sirvió: uno se acostumbra, al principio te da terror subirte a un bus que podrá ser volado por los aires en la próxima parada, pero luego esa sensación la incorporas, y como ves que todo el mundo sigue viviendo con esa amenaza, lo terminas integrando a tus rutinas, es la única manera de vivir.

Es posible que el retorno al trabajo, al transporte público, a la oficina, a la escuela nos darán esa misma sensación, por ello, el nuevo normal será diferente, pero al pasar los días y semanas, estaremos acostumbrados.

El lavarse las manos, desinfectar los alimentos y llevar mascarillas para entrar en contacto físico serán la norma. Como me dijo un amigo, nunca pensé en entrar a un banco enmascarado…y así será.

Otra rutina será hacerse la prueba del Covid-19 para poder trabajar en lugares muy concurridos como fábricas, supermercados, en la construcción, sectores de salud o cuidado de enfermos o adultos mayores. En muchos casos, estos trabajadores deberán presentar certificados de la prueba negativos, para que sus empleadores les permitan trabajar y ante cualquier síntoma de resfrío la prueba se deberá repetir. 
Al presente, el trámite demora 30 minutos como mínimo y hay varios lugares en la ciudad de Toronto donde concurrir y no hace falta una cita previa. Simplemente indique cuál es su lugar de trabajo y lleve su tarjeta de salud o cualquier identificación. Los centros de testeo están organizados para evitar el contacto físico, aunque haya una espera.

Personal con equipo de protección personal le preguntará si tiene síntomas y con quién ha estado en contacto. La prueba consiste en colocarle un isopo en la garganta y hacerlo girar por unos diez segundos, apenas un poquito incómodo, y ya está listo. 

El resultado lo puede consultar en 3 a 5 días en un sitio en internet ingresando el número de cliente que le entregan cuando hace la prueba. Si el resultado es positivo, le contactarán telefónicamente con instrucciones.  Para personas que no tienen todos los síntomas o que tienen síntomas no graves (como dificultad para respirar) la recomendación será quedarse en casa por 14 días y dar la lista de contactos físicos de las últimas dos semanas previas. De esa manera, se les avisará a esas personas para que también permanezcan aisladas en sus casas (ya sean sintomáticas o asintomáticas).

Quienes puedan trabajar o estudiar desde casa, serán los privilegiados y tal vez nunca más volverán a sus rutinas antes del Covid-19. Finalmente, entraremos en la era de las reuniones virtuales y de las oficinas en la casa. Los empleadores y jefes deberán encontrar nuevas maneras creativas de comunicación y evaluación de sus colegas. Ojalá muchos lugares de trabajo mejoren y den condiciones dignas y herramientas adecuadas a sus empleados.

La vida no será la misma, pero no todo es negativo después de todo. El saber encontrar el lado positivo a esta pandemia no es una tarea sencilla, pero tampoco imposible.