¿Contagio o vacuna?

Reflexiones, diálogo y comunidad
Línea Uno
Boletín No 82, Toronto, Febrero 4 de 2022
Boletín Línea Uno, Toronto, Ontario
Consejo de Desarrollo Hispano
DESIGN
BLOG
Go to content

¿Contagio o vacuna?

Boletín Línea Uno 82 Informativo y cultural - Consejo de Desarrollo Hispano / Hispanic Development Council - Toronto - Canada
4 February 2022

por Rodrigo Briones

 
En un intercambio de mensajes con una amiga que vive en las praderas de Canadá, a propósito de la marcha de camioneros a Ottawa, ella me dijo que allí “todos aplauden la acción. Varios amigos camioneros de mis hijos, con todo y sus familias, están allá. Aquí en este pueblito les hicieron la despedida con bombos y platillos.”

La realidad de quienes trabajan en el sector transporte ha sido durante la pandemia digna de ser contada, cuando al comienzo no sabíamos el alcance y la magnitud, los transportes circulaban abasteciendo lo necesario para quienes estábamos encerrados con temor.

Las rutas de Canadá y Estados Unidos están interconectadas, como el comercio y una gran parte de la vida cotidiana “son camioneros que tienen que pasar la frontera a diario y están desesperados con las medidas de los dos gobiernos para entrar y salir”, concluía el mensaje de mi amiga.

El impacto de las medidas de prevención que se han mantenido para protección de la comunidad en general afecta a un sector. Hubo ayuda del Estado en Canadá, pero no alcanza, entonces es esperable que se peticione y que se manifieste de la forma disponible, dentro de las reglas de juego.

La señal de alarma se encendió en mi tablero cuando mencionó que en la zona donde vive, “la gente tiene por seguro que la mejor vacuna es el contagio. Aquí se entiende como que “al que le toca, le toca” (morirse) con pandemia o sin pandemia. La mayoría son cristianos, no católicos”.

No mencionaré lo que bien podría decir San Pedro en las Puertas Perladas: ¿cómo es que has muerto de Covid-19 si había una vacuna disponible? ¿Cómo es que has puesto en riesgo lo más preciado que Dios te ha dado?
La libre interpretación de los acontecimientos de la realidad, y de cómo se unen y afectan nuestra vida cotidiana, dependen de contar con la información más cercana a la realidad y no a nuestros deseos.

Muchas personas se hacen la misma pregunta en los últimos días: si la variante Ómicron es más leve y contraerla proporciona inmunidad adicional, ¿por qué no contraerla y salir de esto de una buena vez? Incluso, quienes solían actuar con cautela se preguntan si deberían exponerse intencionalmente al virus. Si tarde o temprano van a contraer el coronavirus, ¿por qué no contraerlo ahora? (1)

Aun con la protección de la vacuna, se puede infectar a otras personas.

Esta afirmación pone de manifiesto una dimensión no menor de los desafíos que nos presenta la pandemia, es que somos personas viviendo en una sociedad, generalmente en ciudades e interactuando de manera permanente con otras personas.

No hay dudas que todos estamos hartos de la pandemia, pero hay razones para que nadie intente contraer el virus deliberadamente.

Hospitales repletos

Según publicó National Post en una nueva encuesta de opinión pública de Maru Public Opinion, más del 42 por ciento de los canadienses creen que su hospital local está tan abrumado que no confían en que los atiendan si de repente necesitan atención médica.

Mientras tanto, un tercio de los canadienses tiene a alguien en su círculo íntimo para quien ese es, literalmente, el caso: se pospuso el tratamiento por un "problema médico grave" porque los hospitales estaban demasiado ocupados con COVID-19. (2)

Los hospitales canadienses, particularmente en Quebec y Ontario, están siendo llevados al límite de su capacidad de atención, por los efectos de la variante Ómicron. Sin embargo, una de las cosas más sorprendentes de la crisis es lo poco que se tardó en llegar aquí. Ontario es una provincia de 14,5 millones de personas y a mediados de este mes sólo se necesitaron 3.630 personas hospitalizadas con COVID-19 para sumergir a la provincia en uno de los bloqueos más estrictos del mundo.

Al comienzo de la pandemia, los expertos en salud pública hablaban mucho sobre la necesidad de “aplanar la curva”. La idea era que, si podíamos distribuir las infecciones durante un período de tiempo más largo, no habría tanta demanda de recursos de atención médica al mismo tiempo. La variante Ómicron puede que sea menos grave, en especial para las personas vacunadas, pero es el gran volumen de casos lo que está nuevamente saturando nuestros hospitales. Este es el momento de aliviar la capacidad de nuestros hospitales, no de empeorar el problema.

 
La enfermedad no es siempre pasajera

La fiebre, tos y otros síntomas de COVID-19 estarán presentes. La enfermedad activa puede durar de una a dos semanas si es leve o moderada, pero los casos graves pueden durar meses. Los síntomas posteriores a la COVID-19, como tos persistente, fiebre intermitente, debilidad y cambios en los sentidos del olfato o del gusto, pueden persistir durante semanas o incluso meses después de recuperarse de una enfermedad aguda. Los síntomas persistentes a veces se conocen como “COVID-19 prolongado” o “largo”. (3)

Algunos estudios reportan que una de cada 10 personas infectadas con el coronavirus tiene síntomas 12 semanas después del diagnóstico inicial. “Las encuestas a miles de personas han revelado una extensa lista de síntomas, como fatiga, tos seca, dificultad para respirar, dolores de cabeza y musculares.

Un equipo dirigido por Athena Akrami, neurocientífica del University College London que -dicho sea de paso- tiene COVID-19 prolongado, encontró 205 síntomas en un estudio de más de 3500 personas. A los 6 meses, los más comunes fueron “fatiga, malestar post-esfuerzo y disfunción cognitiva”. Estos síntomas fluctúan y, a menudo, las personas pasan por fases en las que se sienten mejor antes de recaer”. (4)

En el caso de la variante Ómicron los síntomas serán más leves, incluso si alguien tiene la fortuna de ser totalmente asintomático, infectarse podría significar días sin trabajar. Podría presentar grandes obstáculos a la hora de cuidar de miembros de la familia que son más vulnerables, con lo que se produciría una catarata de inconvenientes.

Según un estudio realizado en la Harvard T.H. Chan School of Public Health las personas que están vacunadas pueden tener menos probabilidades de propagar el virus porque lo eliminan durante un período más corto que las personas no vacunadas.

El estudio nos ayuda a comprender cómo se compara la producción de virus en personas infectadas con diferentes variantes de este virus. Este trabajo contribuye a nuestra comprensión del comportamiento del COVID-19, a través de variantes e individuos vacunados y no vacunados”. (5)

Hay que tener en cuenta que el momento de máximo contagio comienza uno o dos días antes de la aparición de los síntomas. A menos que se pueda saber a través de una prueba confiable todos los días, no se puede saber cuándo se comienza a contagiar a los demás.

Tratamientos limitados

La mayoría de las personas que se enferman con COVID-19 podrán recuperarse en casa. Algunas de las mismas cosas que hace para sentirse mejor si tiene gripe - descansar lo suficiente, mantenerse bien hidratado y tomar medicamentos para aliviar la fiebre y los dolores y molestias, todo esto también ayuda con el coronavirus.

Más allá de eso, ya se han autorizado tratamientos que pueden usarse para personas hospitalizadas con COVID-19 y otros medicamentos para frenar su progresión en personas que no están hospitalizadas, pero que corren el riesgo de desarrollar una enfermedad grave. Los científicos continúan trabajando arduamente para desarrollar otros tratamientos efectivos.

Como ya publicamos en Línea Uno, el 17 de enero último, Salud Pública de Canadá autorizó el uso del tratamiento antiviral oral de Pfizer, PAXLOVIDTM, para tratar el COVID-19 de leve a moderado en adultos no hospitalizados que tienen un alto riesgo de progresar a una enfermedad grave, incluida la hospitalización o la muerte, pero el medicamento debe ser administrado en un periodo de no más de 5 días de aparición de los síntomas. El tratamiento temprano depende de un diagnóstico rápido, y esto representa un desafío en la detección temprana debido a la carencia de pruebas de diagnóstico.

El ministro de Salud Jean-Yves Duclos dijo que “seguimos comprometidos con el uso de todas las herramientas disponibles para proteger a los canadienses y gestionar los desafíos que plantea la ola de Ómicron. El acceso a tratamientos fáciles de usar, como PAXLOVIDTM, es fundamental para reducir la gravedad de la COVID-19 en los canadienses con alto riesgo de convertirse en una enfermedad grave y para ayudar a aliviar la carga de nuestro sistema de atención médica. Esta es otra herramienta más que podemos usar para combatir el COVID-19 junto con vacunas, pruebas rápidas y seguir todas las pautas locales de salud pública”. (6)

También es cierto que cuanto más tiempo puedan las personas evitar contraer COVID-19, mayor será la probabilidad de que puedan acceder a pruebas oportunas y tratamientos de última tecnología.

Mientras crece la batería de tratamientos que la ciencia aporta cada día y contamos con tratamientos más efectivos para todos los tipos de casos, hay buenas razones para tomar medidas de sentido común, como el uso de cubrebocas en espacios cerrados, mantener la distancia física toda vez que sea posible y la costumbre de higiene frecuente de manos. De esta forma podremos aplazar el contagio, en cualquiera de las variantes. Es la mejor opción para cada uno y para todos.

Mientras armaba esta nota, entre búsquedas de internet y tratando de encontrar las palabras adecuadas, escuche al trovador argentino Jorge Marziali y en una canción que no era la que buscaba decía este trabalenguas: …un poquito a cada uno no le hace mal a ninguno, un poquito a cada cual a ninguno le hace mal”. Aquí dejo el enlace a una producción de 1986, titulada “Cerca Nuestro”: https://youtu.be/xMW_zXx1G1Y



contribuye   pixotronmedia
Hispanic Development Council
Consejo de Desarrollo Hispano
1280 Finch Ave West, Suite 203
North York, Ontario, M3J 3k6
CANADA
Boletín Línea Uno
Back to content