Sentido común significa ser razonable
18 February 2022
La protesta de los conductores de camiones que inició en Ottawa y que ha bloqueado puntos fronterizos con Estados Unidos ha dado mucho de qué hablar en todo este mes, pero lo que me llama la atención es que se ha escuchado mucho el uso de la frase "sentido común".
Quienes se oponen a los mandatos de vacunación y a las restricciones del gobierno y además apoyan las protestas dicen que lo hacen debido a que es de sentido común finalizar las restricciones. Sin embargo, los que apoyan las medidas de los gobiernos Federal y Provinciales también lo atribuyen al sentido común.
Al buscar la definición de sentido común, la respuesta dice que se refiere a los conocimientos y las creencias compartidos por una comunidad y considerados como prudentes, lógicos o válidos. Es decir, es una capacidad innata de juzgar los acontecimientos y eventos de forma razonable, o la forma en que los humanos reaccionamos a diferentes situaciones o eventos. (1)
Si se aplica dicha definición a los acontecimientos actuales, entonces es la capacidad de juzgar razonablemente estos acontecimientos y tomar la decisión más acertada.
Suspensión de medidas
La otra noticia que también hace mención del sentido común fue la decisión de los gobiernos de las provincias de Saskatchewan y Alberta de eliminar los mandatos de la prueba de vacunación contra el COVID-19.
Alberta desde el miércoles y en Saskatchewan a partir del 14 de febrero. Alberta, además, está levantando el requerimiento de que todos los estudiantes menores de 12 años usen mascarilla en las escuelas, también a partir del 14 de febrero. (2)
El premier de Alberta, Jason Kenney, atribuye el relajamiento de las medidas al sentido común, porque asegura que la decisión fue tomada a partir de un plan “cuidadoso y prudente” y debido a que las restricciones han causado división en la población. Según Kenney, entonces, son las restricciones las que han generado sufrimiento y privaciones. (3)
Para mí, y de seguro muchísimas otras personas, el sentido común me dice que el dolor y las privaciones de los últimos dos años han sido provocados por la pandemia global del COVID-19 y no por las medidas para controlar las infecciones, los decesos y asegurar que el sistema de salud no se derrumbe.
Todos queremos que la pandemia llegue a su fin, pero el sentido común indica que con el hecho de emitir un comunicado y levantar el mandato de vacunación para ingresar a lugares cerrados donde se corre más riesgo de infección, o permitir que los niños vayan a la escuela sin mascarillas no se le está poniendo final al COVID-19.
Independientemente de las medidas oficiales en favor o en contra de las medidas preventivas, mi sentido común me dice que no debo confiarme porque la pandemia aún sigue, y está comprobado con hechos y estadísticas oficiales que el uso correcto de una buena mascarilla y la vacunación protegen contra el contagio del COVID-19 y otras enfermedades respiratorias, y que las restricciones a la aglomeración pública han contribuido a disminuir el impacto de la enfermedad durante las fases más infecciosas.
La vacunación sigue siendo el camino
Un editorial del diario The Globe and Mail publicó un artículo el pasado 5 de febrero donde hace ver que la única forma de terminar con la pandemia es la vacunación.
El artículo hace mención al hecho que la provincia de Ontario, que sin levantar los mandatos de vacuna o mascarillas también ha comenzado a suavizar las medidas, publicó nuevos modelos con un mensaje franco: No se puede saber cómo la pandemia va a seguir, pero de lo que el Science Advisory Table (Mesa Asesora Científica) de Ontario sí está seguro es que permitir que los negocios no esenciales que funcionan en lugares cerrados, como restaurantes, bares, salas de cine, casinos, museos y gimnasios reabran de nuevo al 50 por ciento de capacidad, y el aumentar el límite de la capacidad en las tiendas y en las reuniones privadas en interiores, sí va a incrementar las infecciones de COVID-19 en la provincia, aunque no esté claro que tan grande será el rebote. (4)
Sin embargo, el mismo artículo enfatiza en que algo que sí ya se sabe, es que la vacunación es la mejor defensa contra un incremento muy marcado en hospitalizaciones en las próximas semanas, y califica a la vacunación como nuestra "bala de plata", porque existe la evidencia que demuestra la efectividad de las vacunas contra el COVID-19.
Las cifras de muertes en los centros de adultos mayores se desplomaron en los meses posteriores al inicio de la campaña de vacunación en el 2021 y en el verano pasado, el índice de fallecidos en los centros de adultos mayores debido a varias causas no fue diferente a lo que fue en tiempos antes de la pandemia, citando datos de la Canadian Institute for Health Information. (4)
Y si la gente quiere más evidencia, continúa el artículo, en los Estados Unidos al índice de vacunación del 64 por ciento - un 15 por ciento menor que el de Canadá, se le atribuye el número de muertes tres veces más alto que en Canadá y un 63 por ciento más alto que en cualquier otro país desarrollado.
Lo más importante a destacar, las estadísticas de cada provincia prueban que los canadienses vacunados consistentemente han estado menos propensos a enfermarse seriamente de COVID-19 que los no vacunados.
En Ontario, no estar vacunado significa que la persona es seis veces más propensa a la hospitalización y casi 12 veces más en riesgo de terminar en cuidados intensivos que alguien con dos dosis y un refuerzo. (4)
Entonces, de acuerdo con estas cifras el sentido común recomienda que, si una persona no vacunada se siente afectada por las restricciones y mandatos, entonces la solución es vacunarse, usar la mascarilla y cuidarse.
Fuentes:
1- Definición de Sentido Común
2- Alberta, Saskatchewan move to end COVID-19 restrictions
3- Alberta ditches proof-of-vaccine program at midnight, masking for students Monday
4. Want the pandemic to be over and restrictions to end? Get vaccinated
