Levantamiento de medidas y nuevos hallazgos

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Boletín No 87, Toronto, Marzo 11 de 2022
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Levantamiento de medidas y nuevos hallazgos

Boletín Línea Uno 87 Informativo y cultural - Consejo de Desarrollo Hispano / Hispanic Development Council - Toronto - Canada
11 March 2022
por Fernando Rouaux

El gobierno de Ontario acaba de anunciar el levantamiento de todas las restricciones del Covid, incluyendo el uso obligatorio de mascarillas, luego del March break. Esto, por supuesto, es una buena noticia, en la medida de que el número de contagios no vuelva a aumentar y no tengamos que volver atrás.
  
En particular, eliminar el uso obligatorio de mascarillas en lugares cerrados es una medida que algunos piensan es particularmente errada. En un artículo publicado en el Toronto Star, Emma Teitel, columnista del diario, argumenta que deberíamos seguir utilizando las mascarillas por muchas razones. (1) Una de ellas es que las personas menores de cinco años aún no son elegibles para ser vacunadas, y por lo tanto continúan bajo un mayor riesgo de contraer la enfermedad. Otro motivo, argumenta Teitel, es el surgimiento de la subvariante BA.2, la cual se sabe es aproximadamente un 30 por ciento más contagiosa que la variante original de Ómicron y está en franco aumento en Ontario. La Coalición para la Salud de los Niños y Niñas (Children’s Health Coalition), un colectivo de entidades que bogan por la salud infantil, también considera que es una mala idea dejar de usar mascarillas en las escuelas. En el artículo del Star, Teitel afirma que el uso de mascarillas es una medida efectiva, casi inocua y muy económica para vencer al virus. Pero la primera de las cinco razones que da Teitel se refiere a un dato que surgió esta semana, en un artículo publicado en la revista Nature, y que se refiere a los efectos del Covid en nuestro cerebro, incluso en los casos leves.

Nuevos hallazgos

A medida que va pasando el tiempo en el que estamos atravesando esta pandemia, cada vez surgen más trabajos de investigación sobre Covid. Por un lado, la gran cantidad de datos a los que los científicos tienen acceso aportan a la solidez de las investigaciones. Por otro lado el tiempo transcurrido permite analizar las consecuencias de largo plazo.
El hecho de que el Covid afecta distintos órganos y funciones del cuerpo ya es bien conocido. Todos hemos escuchado de la pérdida del olfato, la fatiga, la dificultad para respirar, los problemas cardiovasculares y otras dolencias que produce Covid tanto durante la enfermedad como en el largo plazo, en lo que llamamos Covid largo o extendido.

También se han registrado otros efectos como la depresión y la ansiedad, incluso 3 meses después de tener Covid. (2)
Esta semana se publicó un artículo en la revista científica Nature, donde un grupo de investigadores muestran cómo el Covid afecta el cerebro. El estudio aprovechó una base de datos de imágenes del cerebro de 785 pacientes en el Reino Unido, y las comparó con las imágenes de esos mismos pacientes un tiempo después. Muchos de esos pacientes habían tenido Covid en el lapso entre las dos imágenes, y entonces se pudieron comparar el antes y después del Covid, por un lado, y también las imágenes de quienes habían tenido Covid con los que no lo tuvieron. (3)

Las imágenes mostraron que los pacientes que habían pasado por la enfermedad mostraban varios efectos significativos. Entre esos efectos, se encontraban: una reducción de la materia gris en determinadas áreas del cerebro, signos de mayores daños en el tejido asociado con el sistema olfativo, y una reducción en el tamaño del cerebro en general.

Es importante tener en cuenta que estos son los resultados de un estudio en particular y que los datos son estadísticos. Estos resultados no significan que todas las personas que padecieron Covid tengan estas consecuencias. Sin embargo, los resultados dicen mucho sobre los riesgos de padecer la enfermedad, aún para los casos en que no presente un cuadro grave: un argumento más para evitarla, y en contra de la idea de contraer la enfermedad como forma de conseguir la inmunidad.
 
Mirando al futuro

Es claro que los números de la pandemia, al menos en Canadá han estado bajando. A nivel mundial, luego de la ola de la variante Ómicron, cuando los casos subieron a un ritmo sin precedentes, éstos disminuyeron con la misma rapidez. Sin embargo, la tendencia global de los últimos días es nuevamente de un leve ascenso. (4) Esto, como mencionamos en Línea Uno la semana pasada, es lógico ya que se están levantando las restricciones y por lo tanto es esperable un cierto aumento de los casos.

Cabe recordar que a nivel global, sólo un 64% ha recibido una dosis; en los países de bajos ingresos ese número es del 13.6% (3). En Ontario, el porcentaje de personas con tres dosis es tan sólo del 48%. El ritmo de vacunación bajó significativamente luego del empuje inicial cuando se comenzó a dar la tercera dosis. (5)

Estos números nos dicen que si bien podemos disfrutar del levantamiento de las medidas restrictivas, el riesgo aún persiste. El virus sigue circulando en Canadá y en todo el mundo, con una gran parte de la población que aún sigue desprotegida. Por eso, cuando se acerca el verano y mientras se levantan las medidas, sigamos vigilantes y no tomemos riesgos innecesarios. El uso de la mascarilla dejará de ser obligatorio. Eso no quiere decir que no sea recomendable.









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