Variantes y las nuevas olas ¿qué tan peligrosas son?
18 March 2022
por Fernando Rouaux
En Canadá y en gran parte del mundo gozamos actualmente de la doble sensación de que la pandemia está bajo control y que felizmente se termina esta temporada invernal. En Ontario, al igual como en las demás provincias, las medidas restrictivas se están eliminando casi por completo y hasta se ha anunciado que las pruebas de antígeno negativo para entrar al país no serán requeridas cuando ya se tienen las vacunas completas.
Mientras la nieve se derrite -aunque sigue cayendo en días primaverales-, y los días se alargan ya estamos esperando el poder disfrutar con mayor libertad de los meses primaverales y del verano, pero bien podría tratarse de un breve paréntesis si una sexta ola de pandemia se declara a nivel global. Por ello, no debemos confiarnos.
De hecho, en muchos lugares del mundo las restricciones sanitarias continúan. En China, por ejemplo, donde hace dos años comenzaban los primeros casos, se han aplicado estrategias diferentes al resto del mundo y actualmente hay decenas de millones de personas aisladas (la estrategia es de COVID cero, es decir, tratar de controlar completamente cada brote). (1)
En Hong Kong, desde la llegada de Ómicron se registraron más de 1 millón de casos y 4.600 muertes, con lo que, según reportó la agencia AFP, hubo escasez de ataúdes y las morgues están totalmente desbordadas. La mayor parte de las muertes se dieron entre adultos mayores que no se habían vacunado. En Corea del Sur se están batiendo los récords de casos nuevos, llegando a 400 mil, mientras se alivian las restricciones. (2)
En algunos países de Europa, luego de la ola de Ómicron y el consiguiente descenso de los casos, éstos han vuelto a subir durante la última semana en algunos países como el Reino Unido, los Países Bajos, Alemania, Suiza e Italia. Si bien los números aún son bajos, en Alemania, los casos aumentaron un 48% en 10 días, en los Países Bajos, un 100% en menos de 15 días. Algunos de estos países también han sufrido un aumento en las hospitalizaciones como en Irlanda, Reino Unido y los Países Bajos. (3)
Por supuesto, como hemos señalado con anterioridad en Línea Uno, es lógico que en el momento en que se levantan día a día las medidas, los casos vayan en aumento. Es por ello que desde fines de febrero las muestras de las aguas servidas de Toronto están dando señales de un resurgimiento de los casos. Aunque esperable, lo importante es que este aumento de casos y hospitalizaciones sea monitoreado muy de cerca y que estemos dispuestos a tomar medidas preventivas de inmediato en el caso de que la suba sea demasiado alta.
Nuevas variantes
Como venimos reiterando, mientras haya casos en alguna parte del mundo, existe la posibilidad de que sigan surgiendo nuevas variantes. COVID es una enfermedad viral, y el virus muta con mucha rapidez al reproducirse. Estas variantes se crean por azar, por lo que es imposible predecir sus nuevas características. Por suerte, Ómicron es una variante con mayor tasa de contagio y menor gravedad que Delta, con lo cual, la gran cantidad de casos no se tradujo en la misma proporción de hospitalizaciones y muertes que esta última.
Actualmente circulan en la población varias subvariantes de Ómicron. La última que conocemos es la BA.2. Sin embargo, por ahora no hay ninguna evidencia de que esta subvariante sea más peligrosa que las demás.
Mientras continúan realizándose estudios del comportamiento de BA.2 en la población, el mayor foco debe ser en que se continúe haciendo hincapié en colocar los refuerzos de vacunas que protejan de potenciales contagios, incluso para personas que ya se enfermaron de COVID, ya que es posible volver a infectarse con las nuevas variantes.
Recientemente, la Organización Mundial de la Salud (OMS) confirmó la existencia de la variante Deltacron, la cual resulta de la combinación entre la variante Delta y la Ómicron. Esto era algo que se temía: ¿qué pasaría si la gran capacidad reproductiva de Ómicron se combinaba con la mayor letalidad de Delta?
Por ahora si bien Deltacron ha sido detectada en varios países (Francia, Dinamarca, Alemania, Países Bajos y EE.UU.), por el momento no hay evidencia de que esta variante sea preocupante. Según la OMS, es una variante que por ahora es extremadamente poco frecuente (sólo se han registrado 2 casos en los Estados Unidos). (4)
Por otro lado, se cree que es altamente improbable que esta variante o cualquier otra nueva variante sea capaz de eludir por completo al sistema inmune en el caso de las personas vacunadas o de quienes ya se hayan infectado previamente. De todos modos, “para que una variante sea seria debe producir muchos casos en corto tiempo, de lo contrario no hay de qué preocuparse,” explicó William Hanage, epidemiólogo del Harvard T. H. Chan School of Public Health.
El sistema inmune y la biología del virus no funcionan como un interruptor con sólo las posiciones de “encendido” o “apagado”, sino que siempre es una cuestión de mayor y menor grado de protección. Tanto las vacunas como una infección previa que ya activaron el sistema inmune para una variante seguramente protegerán, al menos en parte, para las demás variantes del virus. Las vacunas han demostrado efectividad para prevenir – no necesariamente el contagio – pero sí sus consecuencias más graves: hospitalización, enfermedad grave, y muerte. (5)
Por esta razón, Estados Unidos recibió el pedido de autorización de emergencia de parte del laboratorio Pfizer para que se apruebe una cuarta dosis en mayores de 64 años. Un análisis de los datos de un millón de adultos mayores de 60 años mostró que tanto las infecciones como la enfermedad severa fueron menores en quienes recibieron una cuarta dosis, al menos cuatro meses después de la tercera. (6)
En Ontario ya se está ofreciendo la cuarta dosis a quienes viven en hogares de cuidado (long-term care homes), a los mayores de 18 años que están inmunodeprimidos, al igual que a quienes tengan tres dosis de vacunas que no hayan sido aprobadas por la Agencia de Salud Pública de Canadá. (7)
Si necesita ayuda para completar su esquema de vacunación, llámenos a nuestra Línea de información del Programa yo me vacuno del Consejo de Desarrollo Hispano al Tel. (437) 335-1859. En esta línea puede dejar su mensaje a cualquier hora del día. Una trabajadora comunitaria le contactará a la brevedad para resolver su inquietud.
Situación global
Tras varias semanas con descensos, los casos de COVID-19 vuelven a subir un 8% globalmente, y la Organización Mundial de la salud advirtió el miércoles que esta situación puede ser el preludio de un problema mucho mayor.
“Estos aumentos se están produciendo a pesar de que en algunos países se hacen menos test, lo que significa que los casos que vemos son la punta del iceberg”, afirmó en rueda de prensa el director de la Organización, el doctor Tedros Adhanom Gebreyesus.
También recordó que “sabemos que cuando aumentan los casos, también lo hacen las muertes. Es de esperar que haya brotes y subidas de casos locales, sobre todo en áreas donde se hayan retirado las medidas de prevención”.
Las nuevas infecciones aumentaron un 8% en todo el mundo en comparación con la semana anterior, con 11 millones de nuevos casos. El mayor aumento se produjo en la región del Pacífico Occidental.
Por su parte, la epidemióloga líder de la Organización afirmó que la subvariante BA.2 de ómicron parece ser la más transmisible hasta ahora. Maria Van Kerkhove explicó que a esto se une una gran cantidad de desinformación y a bajas tasas de vacunación en muchos países.
El doctor Tedros concluyó que la pandemia no ha terminado y pidió a los países seguir vigilantes. (8)
