Furgón de Cola Número 117
7 October 2022
por Rodrigo Briones
“Pero este día siempre genera confusión. Es materia de asombro para muchas personas inmigrantes que llegan al país creyendo que se celebra al igual que en Estados Unidos. Pero hay diferencias entre las dos celebraciones. La primera de ellas: la fecha. Al sur de la frontera es una fiesta que se celebra en el mes de noviembre, el cuarto jueves del mes para ser exactos.
En Canadá, el Día de Acción de Gracias es una fecha producto de la cultura inglesa europea. Lo que se celebra es el año de cosechas. Se agradece la bondad de la tierra.
De acuerdo con la Enciclopedia Canadiense, el primer Día de Acción de Gracias celebrado en Canadá se llevó a cabo el 6 de noviembre de 1879, aunque las poblaciones indígenas ya tenían un recorrido de celebraciones por la cosecha de otoño.
El Instituto Smithsoniano relata que algunas Primeras Naciones buscaran formas de asegurar una buena cosecha "con bailes y rituales". Hay, sin embargo, una disputa, reconocida por la misma Enciclopedia Canadiense, sobre esa primera celebración.
Se ha argumentado que la ceremonia realizada por Sir Martin Frobisher, marino inglés que realizó expediciones al Ártico, no fue en realidad un Día de Acción de Gracias. La disputa proviene principalmente de la razón para agradecer, algo que se mantiene hasta nuestros días, pues el agradecimiento no se limita a la cosecha. En el mundo moderno dar las gracias está más bien vinculado al bienestar general y a las cosas buenas que nos rodean.
Aunque comenzó como una fiesta para agradecer la cosecha, hoy el Día de Acción de Gracias es una fiesta cívica y sobre todo familiar. (1)
Muchas de las personas que llegamos a este país adoptamos esta tradición a poco de llegar al país, no solo porque está impuesta por el feriado y es la ocasión para “la juntada” como dicen en mi barrio. Esas reuniones familiares están armadas con lo que muchas personas han bautizado como la familia elegida. La inmigración tiene el condimento del alejamiento de los familiares que quedan en cada uno de nuestros lugares de origen.
Aquí se adopta a un grupo de personas amigas, con quienes compartimos las alegrías y tristezas, los logros y los desafíos, con la misma intensidad que con la familia. Ellas son las elegidas para juntarnos el Día de Acción de Gracias.
Quienes se animan a incursionar en la preparación de platos exóticos, han visto el pavo al horno como una buena ocasión para aprender algo nuevo, porque si pretendemos preparar el pavo de 10 o más kilos, como si fuera el famoso pollo doble pechuga, fracasaremos al presentarlo a la mesa.
La mirada crítica de los comensales es inevitable ante un ave seca o jugosa, pero quemada por fuera, muchas veces despanzurrada antes de llegar a la mesa, con lo que perdemos la típica foto del corte maestro ante la mirada atenta del grupo.
Lograr que se cocine esta ave de tamaño mayor hasta lo más profundo es un desafío por vencer, lo que no siempre se logra en el primer intento.
El camino más seguro es seguir una receta, me animo entonces a presentar una que he venido repitiendo por más de veinte años, más de dos veces cada año. Seguramente los pavos ya me tienen en la lista de persona poca deseable en Pavoland.
Receta para el Pavo del Día de Acción de Gracias:
Conseguir un pavo natural es lo ideal, pero si es congelado habrá que dejarlo que logre la temperatura ambiente dentro de la heladera por salubridad, por al menos 48 horas antes de la preparación. El peso del animal estará de acuerdo con la cantidad de comensales, calculando poco menos de una libra por persona. De esta forma quedará para comer el resto de la semana, incluso para el exquisito “turkey sándwich”.
Pero no desesperar, si son más las personas invitadas a compartir el festin que las libras disponibles, ponte manos a la obra, porque siempre hay pure, zapallo asado, el relleno – si has optado por hacerlo relleno, tarta de zapallo, los postres, más el riego a conciencia durante la celebración. Conclusión, siempre sobra para el día después. En el peor escenario, los huesos son muy buenos para una sopa, pero esa es otra receta.
Lavar el pavo con agua fría o natural, no caliente, dejarlo que escurra y luego secar con toallas de papel. Sazonar con sal entrefina y pimienta molida en el momento. Dejar en la fuente, debe ser una fuente de horno de esas que aquí se consiguen en distintos formatos, incluso las de papel de aluminio reforzado que andan muy bien, pero tienen la contra de ser de un sólo uso.
Relleno
Si es de tu gusto rellenar el pavo – una excelente elección, prestá atención a estos detalles, caso contrario omití este párrafo o leelo sólo para tentarte:
Cortar una cebolla en trozos pequeños y poner en una sartén con una cucharada de manteca, dejar a fuego medio hasta que el picado esté transparente. Retirar del fuego y agregar a la mezcla: una manzana trozada en pequeñas partes, una media taza de nueces molidas, otra de cranberries secos (arándanos), igual cantidad de apio del mismo tamaño, una taza de pan rallado, una cucharada de sal, otra de pimienta, otra de romero. Otros condimentos posibles, sage and thyme (hojas de salvia y tomillo).
La inclusión de alguna bebida destilada como ron, whiskey o similar queda muy bien, pero le da un sabor alcohólico que podría hacer fruncir la nariz a alguna persona sentada a la mesa, pese a que el contenido alcohólico desaparece en la cocción.
Una vez que se ha logrado una amalgama más bien seca, se procede a rellenar el pavo con la ayuda de una cuchara de madera, aplastando bien el contenido en el interior del pavo y en el hueco del cuello. A veces se hace necesario coser allí, para que no derrame el contenido, lo que exige una clase adicional de cirugía en la facultad de medicina, o los consejos de una madre o tía.
El momento del first look (el primer vistazo), el exterior debe tener una presencia que genere un “Ooh moment”.
Para lograrlo hay que preparar un condimento con el que se cubrirá el pavo, consistente en medio pan de butter (mantequilla o manteca), derretirla dejando 30 segundos en microondas; una cucharada de sal, otra de pimienta, dos de pimienta, una de rosemary (romero) y otras especias. Aquí me detengo porque hay gustos y gustos. Me ha dado buen resultado un poco de comino, otro de salvia, una pizca de tomillo y orégano. La fuerza estará en el romero, pero el regusto de las otras especias se apreciará. Con esa pasta semilíquida se cubrirá el pavo.
Una vez colocado el pavo, relleno o no en la fuente designada, proceder a pintar con una brocha o pincel de cocina. Pintar todo el pavo con esta pasta de manteca y especias. Si tenemos la precaución de hacerlo lejos del calor de la cocina, la pasta base de manteca será ideal para dejar una buena capa. Trabajar a conciencia y pintar todo el exterior del pavo. Esto ayudará a dar un color muy tentador y envolverá al pavo con un sabor único. La base del animal no se podrá pintar, pero los jugos que derrame en la cocción harán su trabajo con el sabor.
Cortar una cebolla grande al medio y luego en rodajas. Con esas media rodajas cubrir todo el pavo. Se podrán adherir con facilidad a la pasta de manteca. Luego cubrir todo con tiras de bacon (tocino). Allí me animo siempre a gastar un poco de tiempo, trenzando las tiras para que quede como cubierto con un pullover de tocino.
El tiempo de cocción será de una hora por libra con el horno a 200 grados Fahrenheit, menos de cien grados Celsius. Es cocción a fuego lento. Esa es la garantía de cocción completa, sin perder la suavidad de la carne, que es el gran riesgo en la cocción del pavo. Llevar al horno cubierto con papel de aluminio de forma completa.
Para saber a qué hora hay que sentarse a la mesa, hay que calcular los tiempos de cocción que depende del peso del animal, agregando 40 minutos para que el pavo se recomponga luego de horas en el horno. Esto es para amalgamar sabores y que obtenga una firmeza al momento del corte.
Sumado todo el tiempo de cocción, más los cuarenta minutos esenciales del final, la mesa debiera estar ya lista para servir los otros manjares que se han previsto. Ojo a este punto, si se pasa el tiempo, el pavo estará frio y perderá su elegancia. Los adicionales pueden ser: pure de papas, zapallo asado en trozo o en pure, la guarnición de salsa de arándanos y todo lo que se te ocurra que puede ser rico. Cuantos más side dishes (platos adicionales), más left overs (sobrantes del pavo) quedarán para los días siguientes Esto es un secreto.
Luego de esta pantagruélica cena que les propongo para la cena de Acción de Gracias, creo que una buena forma de digestión es aprovechar de leer las notas que hemos preparado para el Boletín Línea Uno de esta semana:
Las viñetas de Luis Carrillos nos relatan los reclamos de recuperación de la dignidad social que aparecen en manifestaciones callejeras por las calles de Toronto, un recorrido imperdible que se puede leer aquí de la mano de Luis.
Comenzamos octubre con las elecciones en Brasil, hay una variada gama de matices en el triunfo de Lula Da Silva en la primera vuelta. Alberto Juan Barrientos nos acerca, en una nota que se puede leer aquí, elementos para tener en cuenta para la segunda vuelta que consagrará el presidente del mayor país de Latinoamérica, de cuyo color depende la estabilidad del resto y los pulmones del planeta.
Decía que comenzó octubre y el primer día es, de acuerdo con las Organización de las Naciones Unidas, el día de la persona adulta mayor. Aquí se puede leer la primera de unas notas sobre este sector etario, que recién hace treinta años mereció tener un espacio en la agenda del mundo. Hay que revertir esa visión de que todo debe estar centrado en las personas que producen y las que consumen, como paradigma para la sociedad completa. Aquellas que no encajan, hay que recortarlas como en las caricaturas de las valijas repletas, donde sobran trozos de ropa por los cuatro costados.
En las próximas semanas entraremos en el clima frio canadiense. No me digas nada, no es que soy pájaro de mal agüero, es una realidad incontrastable que tiene sus consecuencias en la vida cotidiana. Una de ellas es la circulación de enfermedades respiratorias de distinto grado. El COVID-19 sigue siendo una enfermedad de gravedad extrema para muchas personas, pero que puede ser conjurada a límites manejables con la adecuada protección de las vacunas. Edna Amador nos presenta toda la información disponible y aconsejable para pasar el invierno en una nota que se puede leer aquí.
El podcast de Línea Uno En Resumen que prepara Sandra Farias cada semana y que es posible sintonizar en ondasfm.ca todos los martes de 8 a 8:30 am, esta semana contiene además de las noticias relevantes, una entrevista a la investigadora en trabajo social Verónica Escobar Olivo, integrante del directorio del Consejo de Desarrollo Hispano y graduada de la Universidad Metropolitana de Toronto, quien reflexiona sobre las oportunidades y desafíos educativos para la comunidad Latino Hispana. Aquí el enlace para escuchar el interesante diálogo, mientras disfruta de un buen turkey sandwich.
Dejaré para la semana que viene la posibilidad que el nuevo líder del Partido Conservador recupere su autoridad moral tras conocerse que sus videos esconden mensajes misóginos, según se denunció en la última sesión del Parlamento. Un tema para la sobremesa.
Por hoy he preferido hacer foco en la posibilidad de agradecer por la vida que tenemos, los encuentros virtuales o reales que podemos generar y en conjunto encontrar la senda que iremos construyendo para tener una vida digna.
¡Feliz Día de Acción de Gracias!
