Por un mundo digital inclusivo
10 March 2023
por Diana Lorena Cortes
La
tecnología ha cambiado drásticamente el mundo en que vivimos, al
permitirnos comunicarnos con personas en todo el mundo, compartir
información en tiempo real, automatizar tareas diarias, estudiar,
trabajar, participar activamente en discusiones de interés y
política, entre muchas otras ventajas de la conexión en línea.
Sin
embargo, a partir de estas nuevas oportunidades, también han surgido
desafíos críticos, especialmente cuando se trata de la seguridad
digital y la igualdad de género, debido a que las mujeres y otros
grupos marginados, a menudo, enfrentan amenazas y riesgos adicionales
en el entorno digital, lo que puede limitar su capacidad para
participar plenamente en la sociedad y aprovechar dichas
oportunidades tecnológicas en su beneficio.
La
seguridad digital es un componente clave para la innovación y el
progreso de nuestra generación y las venideras. Se hace cada vez más
fundamental para la transformación de la interacción virtual de la
sociedad en general.
“Por
un mundo digital inclusivo: Innovación y tecnología para la
igualdad de género",
es el mensaje que eligió Naciones Unidas este 2023 para conmemorar
el Día Internacional de la Mujer. No es casual, ya que estamos en un
momento bisagra de la historia de la humanidad donde el cambio
tecnológico será cada vez más decisivo en todas las esferas del
desarrollo social. El incluir la idea de igualdad de derechos en el
uso de la tecnología es el puntapié para arrancar esta temática.
Veamos
algunas cifras que marcan esta desigualdad (1):
•
Solo
el 63 % de las mujeres utilizan Internet en 2022, en comparación con
el 69 % de los hombres.
•
Para
2050, el 75% de los puestos de trabajo estarán relacionados con
áreas de inteligencia artificial. Sin embargo, hoy en día, las
mujeres ocupan solo el 22 % de los puestos.
En
cuanto a la seguridad digital de las mujeres y las niñas, algunos de
los principales problemas es la prevalencia de la violencia y el
acoso en línea. “Un
estudio de 51 países reveló que el 38 por ciento de las mujeres
habían experimentado personalmente la violencia en línea. (Informe
de Panorama de Género 2022).”
Las
mujeres y las niñas son con frecuencia objeto de acosos en línea,
delitos cibernéticos, robo de identidad, ciber control, pornografía
de venganza, sextorsión y otras formas de violencia, lo que genera
un impacto significativo en su salud mental y en el bienestar
emocional y psicológico. Este tipo de comportamiento crea un entorno
hostil e inseguro, lo que dificulta que mujeres y niñas participen
plenamente en los espacios en línea.
La
estafa cibernética, por ejemplo, es una forma común de delito que
afecta a las mujeres de manera desproporcionada. A veces, son el
objetivo de estafas en línea que buscan aprovecharse de su buena fe
y vulnerabilidad. Estos fraudes pueden incluir esquemas de phishing,
que consisten en falsas ofertas de empleo y sitios de internet
fraudulentos para obtener información personal, financiera, entre
otros.
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Combatir
el ciberacoso
El
ciberacoso es otro problema grave que enfrentan las mujeres, ya que
son más propensas a ser acosadas en línea que los hombres. Esta
problemática se manifiesta de muchas formas, tales como amenazas,
acoso sexual, comentarios despectivos y humillación pública,
suplantación y robo de identidad e intimidación.
Adicionalmente,
el ciber control puede ser utilizado como una herramienta de dominio
por parte de los perpetradores, quienes a menudo suelen ser
conocidos, parejas sentimentales y exparejas.
Otro
problema clave a considerar, es la forma en la que los estereotipos y
prejuicios de género pueden influir en las prácticas y políticas
de ciberseguridad. Por ejemplo, la falta de diversidad en la
industria tecnológica puede resultar en herramientas y políticas de
ciberseguridad que no son totalmente inclusivas para las mujeres y
otros grupos vulnerables.
Sumado
a esto, las mujeres y las niñas muchas veces tienen menos acceso a
la tecnología y la información, debido a roles preestablecidos en
la estructura patriarcal, la cual dicta en el rol femenino el del
cuidado y manutención de tareas del hogar, entre muchas otras
brechas de acceso.
A
nivel mundial esto ha derivado en situaciones tales como abandono
escolar temprano, matrimonios a corta edad, embarazo adolescente,
especialmente en comunidades marginalizadas, vulnerables y pobres, lo
que limita su capacidad para participar plenamente en la sociedad y
beneficiarse de las oportunidades que ofrece la tecnología.
En
ese sentido, la seguridad digital y la igualdad de género están
estrechamente relacionadas, ya que la tecnología y la información
pueden ser utilizadas para empoderar a las mujeres, proporcionándoles
más acceso a oportunidades, recursos y herramientas. Por lo tanto,
es esencial que trabajemos en toda la comunidad para garantizar que
la tecnología y la información estén disponibles de manera segura
para todos, pero especialmente para las mujeres y niñas.
Cómo
prevenir la desigualdad en las redes
A
pesar de los desafíos antes mencionados, existen diversas
estrategias que pueden ayudar a mejorar la seguridad digital y
promover la igualdad de género en el espacio en línea. Por ejemplo,
promover la diversidad e inclusión en la industria tecnológica
puede ayudar a garantizar que las herramientas y políticas de
ciberseguridad sean más inclusivas y representativas. Además,
aumentar la conciencia sobre la violencia en línea y proporcionar
recursos y apoyo para las víctimas puede ayudar a prevenir y abordar
estos problemas.
Es
importante tomar consciencia de los riesgos que se presentan en la
actualidad a nivel cibernético y tomar medidas para proteger nuestra
seguridad digital. Esto puede incluir el uso de contraseñas seguras
y únicas, habilitar la autenticación de dos factores, evitar
compartir información personal, tener precaución al hacer clic
en enlaces o descargar archivos adjuntos en correos electrónicos o
mensajes, y contar con un software de seguridad (antivirus
y firewall),
entre otras precauciones.
A
nivel educativo, hay que enseñar más sobre la violencia y el acoso
en línea, junto con hablar en contra de este tipo de comportamiento
cuando se presentan estas conductas con alguien que queremos o hacia
otras mujeres. La sociedad en su conjunto debe tomar medidas para
abordar este problema.
La
solidaridad es clave en la construcción de un futuro libre de
violencias, así como evitar difundir, propagar y replicar
información que atente contra la imagen, integridad y privacidad de
las mujeres y niñas. Este es un primer gran paso para mitigar el
impacto negativo que producen los ataques contra las mujeres, al ser
revictimizadas y permitiendo que los agresores sigan en la impunidad.
Iniciativas en Canadá
Iniciativas en Canadá
Pero
también es vital que el Estado gestione políticas públicas y
legislativas, encaminadas a la prevención y medidas correctivas
frente a la violencia y el acoso en línea y garantizar que las
víctimas tengan acceso, apoyo y recursos para sobreponerse a estos
graves daños.
La
industria tecnológica también puede desempeñar un papel, diseñando
herramientas y políticas de ciberseguridad más inclusivas y
efectivas, promoviendo una mayor diversidad y representación en la
industria que incluya a más mujeres en la toma de decisiones.
Cabe
resaltar que existen varias organizaciones e iniciativas que trabajan
para prevenir la violencia y el acoso en línea contra mujeres y
niñas. Algunas incluyen grupos de defensa, centros de crisis y
plataformas en línea que brindan recursos y apoyo a las víctimas,
al promover estos esfuerzos y trabajar para crear una cultura que
valore la seguridad digital y promueva la igualdad de género.
Una
de estas iniciativas es la Canadian
Women's Foundation,
que trabaja para prevenir la violencia contra las mujeres y promover
la igualdad de género, la fundación cuenta con varios programas e
iniciativas centrados en abordar la violencia y el acoso basados en
género, así como recursos e información valiosa para afrontar el
odio y la ciber violencia en línea hacia las mujeres y niñas.
Otra
organización que trabaja en esta área es el Centre
for Digital Rights
(CDR),
que aboga por la protección de los derechos y libertades digitales.
Entre sus iniciativas, se encuentra la movilización de
recomendaciones respecto a regulaciones de privacidad en Canadá y
privacidad del consumidor y regulación de la IA (inteligencia
artificial). El CDR está instando a los legisladores a realizar
enmiendas en las leyes que rigen este sector.
Además,
el gobierno canadiense ha tomado medidas para abordar la violencia y
el acoso en línea a través de la legislación, como por ejemplo el
proyecto de ley en el parlamento sobre seguridad cibernética (Bill
C-13),
la cual ofrece protección adicional contra el acecho y el acoso en
línea, así como contra el intercambio no consentido de imágenes
privadas. Estas leyes brindan a las autoridades policiales
herramientas adicionales para investigar y procesar el acoso en línea
y el ciberacoso, y también fortalecen las protecciones de privacidad
para los canadienses en línea.
Para
más información sobre seguridad digital puede consultar recursos
adicionales en el siguiente enlace:
https://canadianwomen.org/blog/interaction-technology-safety-online
Fuentes: