Furgón de Cola Número 135

Reflexiones, diálogo y comunidad
Línea Uno
Boletín No 135 Toronto, 10 de Febrero de 2023
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Furgón de Cola Número 135

Boletín Línea Uno 135 Informativo y cultural - Consejo de Desarrollo Hispano / Hispanic Development Council - Toronto - Canada
10 February 2023

por Rodrigo Briones

En la anterior entrega me enrosqué en esto de la jubilación. Ahora, quiero compartir que en los últimos días se han publicado los nuevos estándares nacionales prometidos para los hogares de cuidado a largo plazo en Canadá, como parte del intento del gobierno federal de evitar que se repitan las alarmantes cifras de muertes en estos centros de atención que marcaron la fase inicial de la pandemia. Es un reporte de 60 páginas, que se suma al conocido en diciembre de casi 120 páginas que es necesario analizar. Hay mucha tela para cortar como diría una amiga. El primer tijeretazo es que son sugerencias cuyo cumplimiento es voluntario. De no seguir las recomendaciones, vamos camino a superar el desastroso honor de ser el primer país del mundo con un récord de personas adultas mayores muertas durante la pandemia de COVID-19.

No hace falta que les recuerde los horrores que encontraron el personal de las Fuerzas Armadas que tomaron la responsabilidad del cuidado en las instituciones con mayor evidencia de negligencia en la atención de las personas ancianas que allí estaban. Estuve a punto de escribir vivían, pero ese verbo es muy digno.

La otra consideración es que esta es una recomendación federal, pero la autoridad de aplicación es provincial. Y, como en muchos casos, los gobernantes son de distinto signo político, la politiquería se mete en el medio y, como en las peleas de elefantes, el pastito de abajo queda chato. Hay una luz al final del túnel: "Si estos estándares hubieran existido antes, creo que no estaríamos a la cabeza del mundo por tener el peor desempeño en atención a largo plazo. Creo, francamente, que habríamos sido uno de los mejores", dijo la ministra de Tercera Edad, Kamal Khera, al afirmar que el gobierno aún se encuentra en las etapas preliminares del desarrollo de la Ley de Atención Segura a Largo Plazo. https://www.cbc.ca/news/politics/long-term-care-canada-standards-pandemic-1.6730780

Para quienes no lo miran por TV

Las series de zombies no entran en el rango de mis preferidas. Creo que ya compartí cómo fue que llegué a ver algunos episodios de Walking Dead. Fue cuando encontraba a mi hijo sentado frente a la TV haciendo un trabajo para la escuela -cursó la secundaria en una escuela de arte, especializándose en guiones cinematográficos y de TV -. La otra experiencia fue siendo portero de una iglesia en el centro de Toronto cuando me tocó trabajar en las instalaciones rentadas como trastienda de la filmación de una película que incluía zombies. En un momento tuvieron que ensayar un ataque en masa, todos maquillados caminando por el amplio espacio de la nave central de la iglesia - despejada de bancos - avanzaban amenazantes practicando sus mejores rostros de terror. Quizás fue esa experiencia o las tardes de los muertos caminando que clausuraron mis intenciones de someterme a ver una película o serie de televisión.

Hasta que llegó “The last of us” (Lo último de nosotros). Basada en un video juego, recordaba ver a mi hijo tratar de superar los obstáculos en parte del juego, pero pocas veces ví encuentros con zombies. La trama me pareció interesante, fue la curiosidad la que me puso frente a la pantalla el domingo a las 9 pm para ver el primer episodio.
La historia tiene lugar veinte años después de que la civilización moderna haya sido destruida. Joel, un superviviente de carácter recio, es contratado para sacar de contrabando a Ellie, una niña de 14 años, fuera de una opresiva zona de cuarentena. Lo que comienza como un pequeño trabajo pronto se convierte en un viaje brutal y desgarrador, ya que ambos deben atravesar los EE. UU. y depender el uno del otro para sobrevivir. (1)


 

El rol protagónico está a cargo de
Pedro Pascal, un actor chileno que nos resultó familiar en la serie Game of Thrones (Juego de Tronos) durante varios episodios y también en una serie ambientada en Colombia, donde fue un agente de la DEA. No quiero anticipar lo que sucede en cada episodio. No es el tiempo aun de profundizar en la controversia que desató el capítulo tres, que dividió aguas entre quienes la empezaron a denostar y quienes nos transformamos en defensores de una nueva realidad. Sí quiero compartir el buen guion y el manejo del suspenso. Los caracteres están bien delineados, lo que se complementa con una buena actuación de Pascal y de la joven actriz, Bella Ramsey como Ellie.

Fue por el impacto de la serie que llamó mi atención un mensaje que recibí en mi teléfono:
Si el actor chileno fuese Cristian De La Fuente, ya lo habrían entrevistado en un estelar de Canal 13 con Don Francisco, sería presidente del jurado en el Festival de Viña del Mar, ya lo habrían invitado a saludar desde el segundo piso de La Moneda y enviarían corresponsales histéricos a USA a vivir en directo todos sus estrenos y preguntarían a cada transeúnte: ¿Conoce al actor Pedro Pascal? ¿Sabía que es chileno?, pero no para nuestra tendenciosa TV (chilena) Pedro Pascal es hoy el actor latino más exitoso del cine, sin embargo, pero para Chile parece no existir. Esto, claramente se debe a que es hijo de exiliados políticos de la dictadura de Pinochet, es nieto de una hermana del presidente Salvador Allende y su madre, Verónica Pascal, era sobrina del mirista Andrés Pascal Allende. Digo era, porque Verónica Pascal se suicidó a comienzos de siglo y por ello el actor adoptó su apellido, en vez de Balmaceda, el nombre de su padre.

El ocultamiento de la cultura, la información y la razón es una práctica medieval que se conoce como oscurantismo. Es una conducta fascista, que en el caso del mundialmente famoso actor chileno Pedro Pascal, resulta tan estúpida como tratar de tapar el sol con un dedo.”

El golpe de estado en Chile ha dejado coletazos en todo el mundo, el caso del actor que logró un espacio en el competitivo mundo del cine podría ser un caso único o quizás uno más. En Canadá hay una iniciativa de Casa Salvador Allende que ha lanzado en Toronto un llamado a los descendientes de exiliados para que brinden su testimonio en un libro a 50 años del golpe de Estado. En el podcast de Línea Uno de esta semana, Sandra Farias nos brinda los detalles de este proyecto de la memoria chilena. Aquí el enlace al podcast completo.

Una de las personas que lee semanalmente estas columnas no cesa de preguntarme cada semana por qué seguimos hablando de pandemia y de COVID. Todos estamos un poco cansados, por decir lo más suave, de esta enfermedad que se instaló en nuestras vidas hace tres años. El encierro, las máscaras, las vacunas y aún estamos danzando con lobos. Me gustaría creer que las críticas, entremezcladas con religión, teorías conspirativas y temores atávicos han disminuido. En parte, porque una a una se fueron cayendo las falsas profecías. En parte también por el trabajo de la ciencia, que sigue su curso de acción. Uno de esos seguimientos científicos está relacionado con la seguridad de las vacunas. Aquí en Canadá hay un estudio, de cual se puede ser parte para ver cuáles son los efectos no esperados de las vacunas. Una nota de Sandra Farias desde este enlace.

Luis Carrillos nos trae en las Viñetas de esta semana una reflexión respecto del impacto del entusiasmo en la vida cotidiana. Lo hace a partir de la interacción cotidiana con las personas que encuentra habitualmente en sus caminatas. Poner en valor el entusiasmo es como dice una de sus clientas, “si no pongo entusiasmo a lo que emprendo me dejo abatir por los desafíos que me agobian”. La nota completa se puede leer desde aquí.

Cada tanto recibo en mi teléfono un mensaje que aun repetido me causa gracias, ya que habla de la inutilidad del cuidado en la salud con diversos ejemplos para concluir que no hemos nacido para terminar en el cementerio sanitos. Nada dice sobre la prevención como forma de tener una buena calidad de vida. Entre este tipo de mensajes y los supuestos beneficios del café, el vino o la cerveza es bueno contar con una voz autorizada. Edna Amador nos presenta en una nota que se puede leer aquí, las nuevas pautas sobre el consumo de alcohol en Canadá.

Por su parte, Carmen Delia Cruz nos trae en su nota semanal – que se puede acceder aquí - los achaques de la vejez, un rosario de posibles enfermedades que generalmente afecta al sector etario algunas veces denominado tercera edad. Interesante leer lo que podría estar esperando al final del camino y de cómo es necesario tener en cuenta la prevención con actos proactivos de parte de cada una de las personas.

En siete días, Línea Uno estará disponible para quienes se han anotado para recibirlo en su correo electrónico, pero si aún no lo ha hecho siga este enlace. La despedida hasta la próxima semana, en la espera de sus comentarios y sugerencias. Nos ayudara a trabajar con más ahincó y renovado entusiasmo.



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